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Aplicación clínica de los inositoles

Aplicación clínica de los inositoles

El inositol es un compuesto orgánico de la familia poliol o polialcohol, encontrada en las membranas celulares. Se considera un miembro de la familia del complejo de vitamina B. Sus mono y polifosfatos están involucrados en diversos procesos biológicos, incluyendo la transducción de insulina, el arreglo del citoesqueleto, control de la concentración de calcio intracelular, descomposición de grasas y la reducción de colesterol sérico.

Además, los fosfolípidos del myo inositol son mensajeros de la actividad de la hormona folículo estimulante (FSH) y algunos estudios han demostrado que los pacientes con síndrome de ovario poliquístico e hiperinsulinemia presentan una mayor epimerización de myo a D-Chiro inositol en el ovario, lo que lleva a una deficiencia de myo inositol y esto reduce la actividad de la FSH y como resultado disminuye la calidad de los ovocitos.

Aunque no todos los estudios son concluyentes, también se ha implicado en algunas investigaciones que las dosis altas de inositol podrían ser útiles para tratar enfermedades psicológicas o psiquiátricas. Por ejemplo, en un estudio pequeño, doble ciego en el que se intentó usar el inositol para el síndrome disfórico premenstrual no se observaron resultados concluyentes por lo que se detuvo esta línea de investigación.

El área terapéutica en la que los inositoles han mostrado mayor efectividad es en el síndrome de ovario poliquístico, especialmente en ayudar a inducir la ovulación. Varios estudios han demostrado que la ingesta de 2 g diarios de inositol ayuda a restaurar la función ovárica, con una tasa de éxito similar a la del citrato de clomifeno, pero con menos efectos secundarios.

Varios estudios han demostrado que existe resistencia a la insulina e hiperinsulinemia compensatoria en aproximadamente el 80% de las mujeres obesas con síndrome de ovario poliquístico y en el 30-40% de las mujeres delgadas. La presencia de receptores de insulina en las células ováricas tanto en mujeres sanas como en mujeres con síndrome de ovario poliquístico respalda la sugerencia de que el exceso de insulina puede tener un alto impacto endocrino en el ovario. Estudios en tejido tecal ovárico aislado han demostrado que la insulina capacidad para estimular directamente la secreción de andrógenos y una mayor respuesta mediada por hormona luteinizante (LH) que en tejido aislado de ovarios sanos. In vivo, la coexistencia frecuente de niveles elevados de LH y concentraciones aumentadas de insulina conduce a una expresión más grave de este síndrome. El aumento de la sensibilización a la insulina se acompaña de una mejora en la función ovulatoria, una disminución en el número de células inmaduras de ovocitos reclutados y una reducción en los niveles de andrógenos tanto plasmáticos como intrafoliculares y, por lo tanto, mejores tasas de fertilización.

Un metaanálisis estableció que no se encontró diferencia en la eficacia sobre los cambios endocrinos entre la metformina y el myo inositol, enfatizando que la mejor tolerabilidad del inositol lo hace más aceptable para la recuperación de los perfiles androgénicos y metabólicos en mujeres con síndrome de ovario poliquístico.

Fuente:

  1. Lete I, Martínez A, Lasaga I, Centurión E, Vesga A. Update on the combination of myo-inositol/d-chiro-inositol for the treatment of polycystic ovary syndrome. Gynecol Endocrinol. 2024 Dec;40(1):2301554.
  2. Unfer V, Carlomagno G, Dante G, et al. Effects of myo-inositol inwomen with PCOS: a systematic review of randomized controlledtrials. Gynecol Endocrinol. 2012;28(7):509–515.

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