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Hiperemesis gravídica y neurodesarrollo fetal

Hiperemesis gravídica y neurodesarrollo fetal

Las náuseas y vómitos durante el embarazo son una afección común y típicamente empiezan a las 5-6 semanas de gestación. Mientras que la mayoría se resuelven al final del primer trimestre, existe una minoría que continúa a lo largo del embarazo. La Hiperemesis gravídica es la forma más severa y se caracteriza por náuseas, vómitos que llevan a deshidratación, desequilibrio hidroelectrolítico y a menudo hospitalizaciones. Se ha demostrado que la hiperemesis gravídica afecta el bienestar de la mujer embarazada ya que sufre pérdida de peso, carencias nutricionales, acidosis, cetonuria, fatiga, frustración y depresión. Tanto afecta su calidad de vida, que los síntomas pueden llevar a que las pacientes consideren la terminación del embarazo o evitar un nuevo embarazo por temor a volver a experimentar la hiperemesis.

Existe evidencia también de los efectos adversos hacia el feto, como mayor riesgo de ser pequeños para edad gestacional, bajo peso al nacer, parto prematuro y APGAR a los 5 minutos, bajo.

En el análisis realizado por G. Koren y colaboradores, se provee de evidencia fuerte que apoya la disrupción in útero del neurodesarrollo fetal en mujeres con hiperemesis gravídica y esto en parte se debe a que precisamente la deficiencia nutricional y los síntomas de hiperemesis gravídica están presentes en las etapas críticas del neurodesarrollo fetal. Aunque la mayoría de los estudios sobre hiperemesis gravídica se han enfocado en la morbilidad psicosocial y física materna, es importante voltear a ver los efectos a nivel cerebral que puede causar en los hijos de mujeres con esta patología.

En un estudio holandés, se observó que los hombres expuestos prenatalmente a deficiencias maternas nutricionales severas, durante el primer o segundo trimestre, exhibían un riesgo incrementado de trastorno de la personalidad antisocial (RR ajustado 2.5), en contraste, cuando esta exposición a deficiencia nutricional fue en el tercer trimestre y sólo fue moderada, no se observó riego incrementado de trastorno de la personalidad. En otro estudio también holandés observaron que 116 recién nacidos varones expuestos in útero a hambruna durante el primer trimestre, nacieron con un volumen cerebral total e intracraneal menor.

En otro estudio realizado por Marlena Fejzo y colaboradores, se observaron los resultados en el neurodesarrollo de 312 niños expuestos de madres con hiperemesis gravídica y observaron que hubo un riesgo 3.28 veces mayor de desarrollar trastornos de atención, retraso en aprendizaje, problemas sensoriales y retraso en el lenguaje.

Hasta le fecha no se ha asociado el tratamiento farmacológico con la presencia de este retraso en el neurodesarrollo sino al déficit nutricional en sí, por lo que es importante que el tratamiento de las pacientes con hiperemesis gravídica incluya vitaminas y suplementación de forma temprana, con el fin de evitar este atraso en el neurodesarrollo.

Fuente:

  • Koren G, Ornoy A, Berkovitch M. Hyperemesis gravidarum-Is it a cause of abnormal fetal brain development? Reprod Toxicol. 2018 Aug; 79:84-88.
  • ] R. Neugebauer, H.W. Hoek, E. Susser, Prenatal exposure to wartime famine and development of antisocial personality disorder in early adulthood, JAMA 282 (August (5)) (1999) 455–462.

Fejzo MS, Magtira A, Schoenberg FP, Macgibbon K, Mullin PM. Neurodevelopmental delay in children exposed in utero to hyperemesis gravidarum. Eur J Obstet Gynecol Reprod Biol. 2015 Jun; 189:79-84.

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