Se han reportado diferencias en la microbiota vaginal en diferentes grupos étnicos y durante el ciclo menstrual, Factores como la edad de inicio de vida sexual, duración del periodo menstrual y antecedentes obstétricos también se han asociado con cambios en la microbiota vaginal, pero sin alcanzar niveles significativos de evidencia.

Chen y colaboradores realizaron un estudio que fue publicado en la revista Nature Communications,, en el cual examinaron las transiciones entre los tipos de comunidades microbiales existentes en diferentes sitios anatómicos del tracto genital femenino. Incluyeron a 95 mujeres que eran sometidas a cirugía por causas no infecciosas. Tomaron muestras a nivel vaginal, cervical, tercio inferior de la vaginal, fórnix posterior, endometrio, trompas de Falopio y líquido peritoneal del fondo de saco de Douglas.

Dentro de sus resultados observaron que Lactobacillus iners y L. crispatus eran las especies más abundantes a nivel vaginal, hacia las trompas de Falopio se observó predominancia de Pseudomonas, Erysipelothrix y Facklamia. Hacia peritoneo las especies predominantes fueron Pseudomonas, Morganella, Sphingobium y Vagococcus.

En general, observaron el tracto reproductivo como un hábitat para bacterias facultativas anaerobias o aerobias, con mayor variedad de bacterias que crecen en condiciones alcalinas hacia el tracto genital superior, en contraste con las especies de Lactobacilos que dominan el tracto genital inferior y viven a un pH menor.

Fuente: Chen C et al. The microbiota continuum along the female reproductive tract and its relation to uterine-related diseases. Nature Communications. 2017; 8:875.